El otro día tuve el caso de un niño. Es un auténtico torbellino, no creo que descanse ni cuando duerme. Pues al «angelito», en el patio del cole, no se le ocurrió otra cosa que, a una oruguita que vio, quitarle las patitas. ¿Qué pasó? Pues que la oruga era una procesionaria del pino. ¿Imaginas cómo llego a la consulta? Sigue leyendo
Procesionaria: Cuidadito con tus niños, pica y mucho
¿El post te ha resultado útil? ¡Ayúdame y puntúalo!
(Votos: 0 Promedio: 0)